CIUDAD DE BUENOS AIRES, (edición i) El reciente anuncio de Venezuela, que supone una mayor inversión en armamento y la reunión del presidente brasileño Luiz Inácio Lula Da Silva con su par francés Nicolás Sarkozy que dio como resultado un acuerdo defensivo, ponen sobre la mesa un tema que por momentos parece dormido.
La región cuenta con la “ventaja” de de no tener restricciones en cuanto a la compra de armamento ya que no existe una verdadera prohibición para los países que están fuera de la Unión Europea o la OTAN.
Uno de los grandes proveedores es Alemania, a pesar de que en ese país existen restricciones para su exportación. Pero hecha la ley hecha la trampa; ya que tal legislación versa sólo sobre armas completas y no en componentes armamentísticos y de material de doble uso.
La única excepción contemplada tiene que ver con intereses puntuales de la política exterior o de la seguridad nacional alemana. Pero hay quienes sostienen que de la letra escrita a los hechos hay un abismo.
Esto ha generado ciertas diferencias en la Unión Europea, ya que En 1998, en el preámbulo del Código los países miembros de la UE, todos se comprometieron a impedir la exportación de armas y equipos militares que pudiesen contribuir a la inestabilidad internacional.
Brasil, Chile, Venezuela y Colombia son los principales importadores de armas alemanas en Latinoamérica.
El periodista uruguayo Raúl Zibechi, dice en un artículo publicado en Red Voltaire que “Evidentemente la importancia de la capacidad militar en el sistema político internacional no terminó con el fin de la Guerra Fría. La mayoría de los gobiernos latinoamericanos afirman que las recientes adquisiciones de material bélico están destinadas a reemplazar material obsoleto”.
De todos modos, Rusia se ha convertido en el gran proveedor sobre todo para Venezuela, con compras millonarias por parte de Hugo Chávez Frías.
El analista sostiene que “La falta de control de las exportaciones de material militar incentiva la carrera armamentista en estos países y profundiza la desproporción entre el gasto en armas y el dedicado a combatir el hambre y la pobreza”.
Por otro lado, la inversión en seguridad, que es el gran problema común por el que atraviesa la región no es suficiente, según la visión de muchos de los encargados de manejar ese área.
Desde donde sí crece la inversión en seguridad es desde el lado de los ciudadanos, que deben proveerse de medios para mejorar la calidad de su seguridad como alarmas, rejas, perros entrenados y vigilancia privada, según sus posibilidades.
Sólo en 2006, la inversión en seguridad de los hogares aumentó un 20% y la inseguridad está siendo un negocio por demás rentable para todos los proveedores de este tipo de servicios en toda la región.
Tan sólo por poner un ejemplo, según la muestra del PNUD, un promedio de 10,9% de los hogares del municipio de ciudad de Guatemala tiene contratado este servicio.
Justamente Brasil y Venezuela encabezan la lista de países con graves problemas de violencia y son también los que han decidido invertir grandes sumas en material defensivo. Chávez se prepara para un conflicto con Colombia mientras cada día mueren venezolanos en manos del crimen violento.
La reciente reunión de Luiz Inácio Lula Da Silva con Nicolás Sarkozy supuso un acuerdo de transferencia de tecnología militar y espacial. Brasil podrá fabricar aviones, helicópteros y submarinos militares. Esto puede involucrar al consorcio francoalemán European Aeronautics, Defence & Space (EADS, controlante de Airbus). Sarkozy precisó que se trata del Scorpene (que ha adquirido Chile) y los aviones Rafale.
Esta alianza es clave para una futura entrada de Brasil al consejo de seguridad, que será apoyada por Francia.
Otro de los países ávidos por ingresar al consejo de seguridad es Venezuela, de hecho compitió el pasado año con Guatemala y finalmente fue Panamá el país elegido.
Su ministro de Defensa, Gustavo Rangel Briceño, aseguró que su país se encuentra en un proceso de revisión en el que no descarta compra de armamento.
Rangel dijo “No descarto que se puedan adquirir armas para renovar nuestro sistema. Sobre todo armas de pequeño calibre para dotar a los hombres de forma individual y de mayor calibre para la defensa aérea”.
El motivo, según argumentan desde Caracas, tiene que ver con custodiar la frontera debido a un supuesto plan de Estados Unidos para infiltrar paramilitares al país desde Colombia.
Chile, por su parte, se ha embarcado en un proyecto de renovación por US$ 500 millones de dólares, según informó el diario El Mercurio que data de la presidencia de Ricardo Lagos (2004) y que comprende adquisiciones hasta 2014.
Ese paquete incluye la compra de 10 aviones F16 a los estados unidos y 18 a Holanda, pero usados de los cuales ya ha llegado una partida. También de ese país compraron tres fragatas. Cuando se mencionó el término “carrera armamentística”, el gobierno chileno pronto salió a desmentirlo diciendo que se trataba de un recambio en pos de la modernización.
La armada chilena acaba de recibir el submarino de tipo Scorpene, bautizado como O’Higgins a la Armada de Chile de manos del consorcio franco-hispano que los fabrica y este es uno de los indicios de que se termina el proceso de recambio de material. El año pasado se había bautizado otro submarino de este tipo en España.
“Esta renovación de unidades ha sido gestionada con la mayor transparencia con nuestros países vecinos y toda la región sudamericana. No estamos en una carrera armamentista, sino reemplazando material de más de treinta años de servicio, cuya mantención resulta onerosa”, dijo el ministro de Defensa chileno Jaime Ravinet.
El O’Higgins tiene 66,4 metros de largo, 6,2 metros de ancho, un calado de 6,2 metros, un desplazamiento en superficie de 1.525 toneladas y 1.668 toneladas bajo el agua. Sumergido, alcanza una velocidad de 20 nudos y pueden operar a más de 300 metros de profundidad. Su permanencia bajo el mar puede alcanzar hasta los 50 días. Su dotación, en tanto, es de 36 tripulantes.
Los submarinos convencionales Scorpene disponen de 6 tubos de lanzamiento para 18 armas de tipo convencional (torpedos).Son consideradas naves especiales para operar en misiones oceánicas, antisubmarinas y de lucha sobre superficie.
Por su parte, el gobierno peruano realizó un ejercicio de guerra a fines del año pasado, que según analistas en el tema, llamó mucho la atención.
Tuvo lugar en “Cruz de Hueso”, al sur de Lima y generó mucha repercusión en la prensa porque coincidió con la llegada de dos dos carros de combate Leopard 2A4 a Chile. En la demostración se lucieron todas las fuerzas pero por sobre todo el ejército. El presupuesto 2008 en Defensa supone una inversión por unos US$ 450 millones, uno de los mayores esfuerzos en la historia reciente del Perú. Los objetivos de tal desembolso tienen que ver no sólo con establecer un sistema de vigilancia y control territorial completo, si no además de tener la capacidad de responder ante cualquier amenaza. Un mensaje velado a Chile.
El combate contra el narcotráfico es otro de los objetivos de la estrategia de Defensa en el Perú, prueba de lo cual fue la llegada de 14 helicópteros Mi-17 que fueron enviados a Rusia para ser reparados. Su función es la de custodiar la zona del VRAE, Valle del Río Ene-Apurimac (VRAE). Esta región es la segunda a nivel mundial en cuanto a producción de hoja de coca.
Por el momento, las modernizaciones de los respectivos ejércitos estaban inscriptos en la intención de participar de misiones de paz y para eso debían contar con el armamento lo suficientemente moderno como para cumplir los requisitos de Naciones Unidas.
Las Fuerzas Armadas uruguayas resultan el ejemplo más claro de esta situación, ya que gracias a su rol en las misiones fue renovando gran parte de su equipamiento.
Por lo que puede apreciarse, hay una renovación de equipamiento que si bien no se destina a alguna hipótesis de conflicto en particular, sirve como disuasión ante posibles agresiones externas. La única excepción es la de Venezuela, con un presidente que insiste en provocar a Colombia para forzar un conflicto bélico y un avance sobre Bogotá de la mano de las FARC. “Uribe hace lo que diga Bush y Bush quiere guerra".
Fuente: http://www.urgente24.info
3 comentarios:
LOS CHILENOS TENDRAN BUEN ARMAMENTO PERO ,SON BRUTOS , TORPES, INEPTOS Y NO TIENEN ESTRATEGIAS PARA UNA GUERRA, MIENTRAS LOS PERUANOS SON HÁBILES E INTELIGENTES EN GUERRAS EN LA SANGRE LO LLEVAN Q LOS PARECE
Jajaj.pero vamos 2 cero amigo.no hables de mas cuando realmente no tienes ni idea en cuanto a estrategia se refiere.y al parecer de historia tampoco.
Te quedo muy bonito eso de que Venezuela provoca a Colombia para provocar una guerra. Te pasaste por alto el ataque de los colombianos al territorio ecuatoriano. Tampoco señalastes nada de los 150 paramilitares que Uribe metio en Venezuela para asesinar a Chavez. Tambien se te paso la red de espias que fue desmantelada en Venezuela integrada por colombianos. Pero lo mas grave es la llegada de paramilitares, creados y entrenados por Uribe para afectar la paz en Venezuela. Esta gente se ha dedicado a la delincuencia, el cobro de vacunas y el sicariato. Nosotros en Venezuela no conociamos esos procedimientos delincuieciales de los colombianos hasta que Uribe los introdujo en nuestro pais. Te sugiero te informes primero antes de lanzar comentarios sin ninguna sustentacion.
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