Al menos 14 civiles, entre ellos tres mujeres y cinco niños, murieron durante un ataque aéreo de la ocupante Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en el norteño distrito afgano de Siagh Gerd.
Una comisión parlamentaria encabezada por el diputado Abdul Satar Khawasi confirmó hoy la masacre, tras escuchar los testimonios de los vecinos de la localidad.
Según esas informaciones, las fuerzas norteamericanas bombardearon la zona desde la noche del martes y hasta la madrugada del día siguiente.
La misión liderada por Khawasi presentará ante la Asamblea Nacional pruebas, incluidas fotografías de las víctimas y de los destrozos causados por la aviación estadounidense.
El lamentable episodio se suma a uno materializado el miércoles por efectivos de la ocupante Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad (ISAF) que mató a ocho civiles, de ellos siete niños y una mujer en una operación en la provincia afgana de Parwan.
Los mandos de ISAF precisaron en una declaración que la redada se concretó en una zona de alto riesgo, donde se refugian, indicaron, jefes importantes del movimiento insurgente del Talibán.
La comunicación refiere que aeronaves de la coalición internacional ofrecieron apoyo aéreo a soldados afganos que combatían a los insurrectos.
El presidente afgano, Hamid Karzai, acusó la víspera a la OTAN de asesinar civiles en operaciones contra la población, bajo el pretexto de perseguir y liquidar a integrantes de la oposición armada.
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