Las exportaciones israelíes en defensa y seguridad rondaron los 7.000 millones de dólares (unos 5.200 millones de euros) el año pasado, lo que sitúa a Israel entre los primeros países exportadores del mundo en este sector, según datos preliminares del Ministerio de Defensa a los que tuvo acceso Efe.
Esta cifra, que debe ser confirmada en mayo por los balances anuales de las industrias del sector, representa un incremento del 20 por ciento con respecto a 2011 y se acerca al techo histórico israelí de alrededor de unos 7.500 millones en 2010.
Se trata, en cualquier caso, de unos resultados más altos de lo esperado debido a la tendencia que la crisis mundial ha generado en este mercado.
"La tendencia mundial es de un descenso en el aprovisionamiento de equipos militares y se siente particularmente en Europa Occidental y Estados Unidos", explicó a Efe una destacada fuente del Ministerio israelí de Defensa.
Este mercado mueve actualmente en torno a 100.000 millones de dólares anuales aunque, por sus peculiaridades, la industria israelí sólo apunta a apenas un tercio de esa suma.
"Israel no fabrica barcos, ni portaaviones, ni grandes plataformas, por lo que el mercado relevante para nuestra industria sería de unos 30.000 millones de dólares", agregó.
EEUU, Rusia, Alemania, Francia y Gran Bretaña son los principales exportadores del mundo, con un 75 por ciento de las exportaciones, a los que sigue China y, a continuación, un grupo de países más modestos entre los que se cuentan España e Israel.
Según publicó recientemente el diario Haaretz, con los resultados de 2012 Israel se situaría entre el cuarto y el sexto puesto entre los principales exportadores de armas del año pasado, aunque el Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI), punto de referencia en este campo, no ha publicado aún los datos para 2012.
En su última lista, Israel aparecía en la décima posición y sólo tres de sus empresas -Elbyt, IAI y Rafael- estaban entre las 100 principales exportadoras del mundo.
La industria israelí vende principalmente a EEUU y Europa, aunque la limitaciones presupuestarias impuestas por la crisis y la reducción de la actividad militar en escenarios como Irak y Afganistán la han convencido a desviar los esfuerzos comerciales a países en desarrollo del Sudeste Asiático y Latinoamérica.
"Israel invierte mucho en América Latina, una región en buena situación de crecimiento y con la que tenemos una estrecha cooperación", subrayó el funcionario sin entrar en detalles.
El volumen de exportaciones a esos países en este campo osciló en los últimos años entre 300 y 500 millones de dólares.
Otros estados con los que Israel mantiene estrechas relaciones en este ámbito son Colombia, Chile, México y Perú.
"No hay que buscar guerras para vender seguridad", observó a Efe la fuente, al justificar el interés latinoamericano en la tecnología israelí, que no exporta a estos países maquinaria pesada de guerra sino sofisticado equipamiento electrónico para la vigilancia de fronteras, regiones inhóspitas y todo tipo de instalaciones estratégicas.
En ese sentido, una de las puntas de lanza de sus exportaciones a nivel mundial es la de los aviones sin piloto o "drones" y otros vehículos no tripulados, en los que su industria trabaja desde hace cuarenta años y que disfruta de gran prestigio internacional.
Otra de las principales apuestas israelíes para los próximos años es el innovador sistema antimisiles "Iron Dome" (Cúpula de hierro), en el que numerosos países han mostrado curiosidad por su innovadora tecnología pero que, por ahora, parece no encontrar demasiado mercado.
"No diría que somos una potencia, pero en algunos campos, como el de la defensa antiaérea, somos líderes mundiales", aseguró la fuente de Defensa, al destacar la importancia de que muchos de los sistemas israelíes lleven el simbólico sello de "Combat Proven", es decir, probado en combate por el Ejército israelí.
Un ejército que por su reducido tamaño no puede absorber más que alrededor del 25 por ciento de la producción de la industria local, de la que llegan a depender hasta 150.000 israelíes.
El funcionario destacó que la exportación es vital para Israel con el fin de "mantener abiertas las líneas de producción y la investigación necesaria para cubrir las necesidades del Ejército israelí".
Por ello y por el aporte de esta industria al PIB nacional, el Ministerio de Defensa se ha puesto como objetivo llegar a los 10.000 millones de dólares en exportaciones durante los próximos años, una suma para la que aspira a incrementar la participación de la pequeña y mediana industria, la más castigada por los efectos de la crisis.
Vía | elconfidencial.com
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