Rusia experimenta motor de hidrógeno en submarino

El submarino B-90 Sarov equipado con el primer motor experimental ruso de hidrógeno podrá ser probado por la Armada antes de que concluya 2012, destacan hoy aquí medios de prensa.

Los propulsores alimentados por este combustible tienen la posibilidad de ser instalados en los sumergibles del tipo Lada y Amur-1500 del proyecto 677, según reporta el diario Izvestia.

En las unidades diésel-electricas tradicionales se emplean baterías como propelentes de los motores, pero cuando estas se agotan las naves tienen que subir a la superficie, con la correspondiente pérdida de invulnerabilidad.

La introducción de pilas de hidrógeno como propulsores a través motores eléctricos, aumenta la autonomía de navegación y disminuye la sonoridad, característica que representa menos posibilidades de detección por los medios técnicos del enemigo. Un solo submarino del proyecto 667 posee la Marina de Guerra rusa en la actualidad, el San Petersburgo, el cual está en fase de pruebas.

Construido en 2008 y con un desplazamiento de cuatro mil toneladas, la unidad B-90 Sarov es un modelo experimental y única nave del proyecto 20120, y se utiliza para ensayar nuevos tipos de armamentos, indicaron las fuentes.

Alemania ha desarrollado con éxito los propulsores de hidrógeno en sumergibles de los proyectos U-212 y U-214.

El complejo militar industrial ruso desarrolla también submarinos no tripulados con el objetivo de utilizarlos en misiones especiales, confirmó recientemente Anatoli Shlemov, director del departamento de armamento de la Corporación Unida de Contrucción Naval.

Shlemov recordó que la tecnología de estos "drones" subacuáticos fue desarrollada por la Unión Soviética en la década de 1980.

Por eso la Armada rusa renunció a finales de esa década a los sumergibles ligeros tipo Piraña, exportados al extranjero, y siguió la vía de las nuevas tecnologías robotizadas, por su mayor potencial, concluyó el experto

Vía | prensa-latina.cu